El libro fue lanzado el pasado viernes 14 de agosto y cuenta con perspectivas que ayudan a entender cómo funcionan los sistemas previsionales en mundo y cómo opera el mercado de rentas vitalicias en Chile.
Discurso presentación libro «Escáner a las Rentas Vitalicias»
- Comunicados
- 17 agosto, 2015
Autoridades, parlamentarios, representantes de las Compañías de Seguros y de la industria en general, amigos de la prensa. Les agradecemos su presencia.
En nombre de la Asociación de Aseguradores (AACH) les doy la bienvenida y agradezco su presencia en el lanzamiento del libro “Escáner a las Rentas Vitalicias, Exitos, Riesgos y Grandes Oportunidades Hacia el Futuro”.
Como una industria que forma parte importante del sistema previsional, quisimos aportar al debate, con una investigación de calidad, independiente, en que participaran relevantes personalidades del mundo económico, elaborando análisis técnicos, conclusiones y propuestas.
Es primera vez que se publica una investigación de este tipo sobre Rentas Vitalicias, por lo que estamos seguros que los análisis aquí contenidos contribuirán a la discusión país sobre cómo perfeccionar el sistema previsional.
La Previsión Social es un tema central en el debate público actual y más ahora cuando el sistema chileno está en pleno proceso de revisión. Durante la última década se ha llevado adelante una discusión seria sobre el tema, la que ha derivado en diversos estudios, propuestas de política y reformas al sistema. Esta discusión se ha caracterizado por estar apoyada de amplia evidencia teórica y empírica. Un ejemplo de esto son las comisiones asesoras presidenciales creadas con el objetivo de estudiar a cabalidad el sistema previsional y sus posibles modificaciones.
Las conclusiones de la Comisión Marcel creada en 2006 guiaron la reforma de 2008 y desde el año pasado la Comisión Bravo trabaja en una completa revisión que busca recomendar políticas, en línea con la mejor consecución de los objetivos que poseen todos los sistemas previsionales.
Nunca está de más recordar el importante espacio que las pensiones ocupan en la sociedad moderna. En nuestro país actualmente hay casi 10 millones de afiliados al sistema de AFP, que representan aproximadamente el 55% de la población, y se pagan más de 1.100.000 pensiones cada mes. El objetivo de las pensiones se ha mantenido claro y consistente: asegurar ingresos que permitan una vida digna a los miembros de la sociedad que no pueden continuar trabajando por alguna contingencia. Sin embargo, la forma de lograrlo y las dificultades a las que se enfrenta el sistema en un mundo cambiante, son un desafío.
Es aquí donde las compañías aseguradoras tenemos un rol trascendental que cumplir, por medio de la oferta de Rentas Vitalicias como modalidad de pensión, las que día a día han ganado mayor espacio, ofreciendo seguridad a los pensionados. El año pasado el 65% de las personas que se pensionaron, escogieron hacerlo con este método.
El libro que presentamos hoy destaca la solvencia del mercado de seguros en Chile en general, y la alta competitividad de las Rentas Vitalicias en particular. Las Rentas Vitalicias operan en Chile desde 1983, en el marco del sistema privado de pensiones. Mediante el Sistema de Ofertas Públicas de Pensiones (Scomp), implementado por AACH en conjunto con la Asociación de AFP, las personas tienen la posibilidad de aceptar sus pensiones.
Un aspecto positivo del sistema de pensiones chileno, y de las Rentas Vitalicias, es que está diseñado para ser autosustentable desde un punto de vista financiero. Esto reduce significativamente la carga fiscal, ya que el Estado solo debe hacerse cargo de las pensiones solidarias. De hecho, el gasto público por concepto de pensiones en Chile es de un 3,4% del PIB. Esto contrasta, según datos de la OECD, con la situación compleja que enfrentan países como Alemania donde el gasto por el mismo concepto es 11,3%; Francia, 13,7%; Grecia, 13%; y Japón, 10,2%.
Más todavía, la mayoría de los países o instituciones que han estructurado su sistema de previsión en torno a esquemas de reparto combinados con beneficios definidos-lo contrario del sistema chileno de rentas vitalicias-están enfrentando problemas de solvencia serios. Optar por una Renta Vitalicia tiene diferencias importantes en cuanto a los elementos de seguridad que se otorgan. La Renta Vitalicia es una pensión en UF para toda la vida. En este sentido, ofrece inmunidad ante las volatilidades del mercado y los aumentos en las expectativas de vida. En la mayoría de los casos, la pensión es la única fuente de ingresos del jubilado y por lo tanto, resulta relevante que cuenten con un ingreso mensual que los proteja contra eventuales fluctuaciones financieras. Una pensión en UF logra este propósito y protege contra la inflación. La mayor longevidad de la población, fenómeno mundial del que nuestro país no está exento, hace que las personas busquen alternativas con mayor seguridad y encuentran refugio en productos como las Rentas Vitalicias. Para responder a estos compromisos de largo plazo, las compañías de seguros tienen constituidas reservas técnicas que permiten hacer frente a las Rentas Vitalicias comprometidas. Esas reservas están invertidas en el mercado financiero, con el apoyo de profesionales altamente calificados. Todos los meses se recalcula la reserva técnica, en función de la cartera vigente de las compañías de seguros y trimestralmente éstas se someten al Test de Suficiencia de Activos (TSA), que proyecta los pagos de pensiones hasta que toda su cartera no esté vigente y la compara con los flujos de las inversiones. Todas han cumplido holgadamente el TSA, por lo que las compañías honrarán sus compromisos de largo plazo, para la tranquilidad de quienes nos eligen. Además de ofrecer beneficios para los jubilados, la existencia de este producto genera un círculo virtuoso que otorga estabilidad financiera y aportes concretos al desarrollo del país. Cerca del 90% de los fondos para inversiones de la industria aseguradora, provienen de las Compañías de Seguros de Vida, por el importante rol que cumplen en las pensiones a través de las Rentas Vitalicias. Es reconocido por expertos en el mundo, que los inversionistas institucionales contribuyen a la estabilidad financiera. En Chile, los seguros son el segundo inversionista institucional, después de las AFP, con un monto que bordea los US$ 50 mil millones. En ese rol, las compañías de seguros son impulsores del desarrollo económico del país. Son causa y consecuencia del progreso ya que dinamizan la economía, y las personas, al lograr acceder a más bienes, protegen su patrimonio y crecientemente contratan seguros, conformando un círculo virtuoso. Las inversiones del mercado asegurador han ido creciendo sostenidamente en las últimas décadas gracias a una buena gestión. Durante el año 2014, el total ascendió a US$ 47.933 millones. El portafolio se encuentra diversificado, para minimizar el riesgo asociado, lo cual es otro aspecto positivo para el mercado. Asimismo, dados los compromisos de pago de pensiones, las compañías requieren invertir a muy largo plazo. Gracias a ello, se ha desarrollado un mercado de capitales profundo, en que los proyectos de inversión encuentran financiamiento adecuado a sus necesidades. El principal destino de estas inversiones son los bonos emitidos por empresas, con US$ 15.059 millones. Los siguen los bonos bancarios, con US$ 6.753 millones, inversiones inmobiliarias, con US$ 6.670 millones e inversiones en el extranjero con US$ 6.179 millones. Como empresas, sabemos que el dinamismo de la economía siempre requiere de cambios. Creemos que hay dos aspectos que como sector financiero y país deberíamos mejorar. Uno de ellos es el aumento sustancial del 20% actual en el tope que tienen las aseguradoras para invertir en el exterior. La ley que hoy rige estas operaciones, aunque parezca increíble, es del año 1931. A diferencia de las AFP, que tienen un límite más alto y flexible, que fija el Banco Central, para las compañías de seguros ese porcentaje sólo puede modificarse por ley. El proyecto de ley sobre Capital Basado en Riesgo, que está en segundo trámite en el Senado, elimina este límite, contra una consecuente exigencia patrimonial. Sin embargo, el problema es actual y apremiante y se requiere una solución a la brevedad. El otro aspecto, es un tema país. Creemos profundamente necesario avanzar en la construcción de carreteras, puertos, hospitales e infraestructura en general, para profundizar el crecimiento de Chile. Ya han pasado muchos años, una década, desde que la industria fue gran inversionista en carreteras, mediante bonos de infraestructura de concesiones de largo plazo. Esperamos que ese ímpetu modernizador vuelva, para seguir aportando. Creemos que el libro “Escáner a las Rentas Vitalicias, Exitos, Riesgos y Grandes Oportunidades Hacia el Futuro” es un valioso aporte para las discusiones actuales y esperamos que a través de éste, el debate se enriquezca. Cada uno de los seis capítulos abarca un aspecto distinto sobre el tema y presenta tanto evidencia como teoría, para respaldar sus opiniones de manera responsable y documentada. Está diseñado para que el lector lea el libro completo o bien pueda optar por analizar sólo los capítulos que le resulten de mayor interés. Agradecemos enormemente a sus nueve autores, que han plasmado su experiencia y conocimiento en este libro, además a todos quienes participaron de la creación del libro. Esperamos que todos ustedes aquí presentes lo disfruten y valoren, ya que creemos firmemente que las Rentas Vitalicias son una alternativa de gran valor para la sociedad chilena y el sistema previsional. Por su atención, muchas gracias.